Coronavirus | “Los dermatólogos estamos siendo verdaderamente útiles en esta pandemia”
24 abril, 2020Coronavirus | “Estamos diseñando cómo ponernos de nuevo en marcha”
28 abril, 2020Uno de los primeros hospitales en retomar su actividad dermatológica ha sido el Hospital Central de la Defensa Gómez Ulla de Madrid. A este centro, le seguirán otros muchos con diferentes organizaciones y experiencias, pero siguiendo todos ellos los más estrictos protocolos en seguridad y prevención para que ni pacientes ni personal se vean expuestos a un mayor riesgo de contagio por el nuevo SARS-CoV-2.
La ubicación de las consultas de Dermatología en este hospital madrileño, en un edificio distinto a la zona de hospitalización, ha favorecido la puesta en marcha de la actividad del servicio de Dermatología. “Los más proactivos han sido las personas que forman parte del departamento de administración, enfermería, auxiliares… Y luego dirección médica y gerencia han aceptado mi propuesta de protocolo para ponernos de nuevo en marcha”, señala el Dr. Santiago Vidal, jefe de Servicio de Dermatología de este hospital.
Lo que ha ideado este especialista es el inicio de estas consultas con personal sanitario que ya ha pasado la infección COVID-19. “Es una forma de no poner en riesgo al personal ni tampoco a los pacientes que vengan, ya que quienes les vamos a tratar ya hemos pasado la infección”, explica.
Además, como todavía no hay seguridad total de que una persona que ya ha tenido la infección, no la vuelva a sufrir, se toman otra serie de medidas de seguridad y prevención. “Se han habilitado dos áreas distintas: una para pacientes que no han estado expuestos al virus ni en contacto con un posible afectado y otra para pacientes que sí han podido estar en contacto con una persona con COVID-19”.
La sala donde espera el paciente sin exposición al virus es una sala grande, de 30 o 40 metros, que se desinfecta todos los días. “Ahí, como máximo, hay dos personas, una sentada en una fila en un lado de la pared, y otra en el lado opuesto”.
Minimizando riesgos
Si hay sospecha de infección por coronavirus, el paciente pasa a otra sala de espera. “Son dos circuitos separados”, señala el Dr. Vidal. “El paciente que viene a estas consultas tiene menos riesgo que cuando va a un supermercado. Aquí se toman muchas más precauciones”.
Llevan con esta consulta activa unas dos semanas y en ella participan las recepcionistas, una enfermera, dos auxiliares, él y otros dos dermatólogos, uno jubilado que pidió incorporarse para colaborar en esta situación y otro en tiempo parcial. “Los otros seis dermatólogos del servicio se encuentran desempeñando tareas relacionadas con pacientes COVID-19, cuatro de ellos en plantas Covid, codo con codo con internistas y neumólogos. Para mí es un orgullo que, en el desescalado de personal en plantas, el jefe de Neumología me ha pedido contar con ellos hasta el final”.
“De momento, estamos viendo a 10-15 pacientes por día. Hay que citarles con mucho margen de tiempo entre uno y otro para que no coincidan, y luego empleas más tiempo con cada uno de ellos porque tratas de resolver en una consulta todos los procedimientos que antes se hacían en diferentes días. Por ejemplo, si citamos a un paciente, que Atención Primaria ha diagnosticado como posible cáncer de piel, le advertimos por teléfono que, seguramente el mismo día que le veamos, le quitaremos quirúrgicamente la lesión”, indica este especialista.
Para poder realizar todos estos procesos de forma segura, hay que planificar bien las citas antes de que el paciente acuda al hospital. En el caso de aquellos a los que hay que realizar una intervención quirúrgica, se requerirá EPIs para el personal que atienda al paciente durante la intervención.
“Tenemos consulta todos los días. Vamos llamando a los pacientes para programar la semana. Muchos no quieren venir, por miedo. Pero aquellos con enfermedades crónicas graves, sospechas de malignidad, reacciones cutáneas graves no pueden esperar. El hecho de que les digamos cómo nos estamos organizando, las medidas que tomamos, es importante porque son los primeros pasos para volver a la normalidad”, apunta este especialista.
Empezando en teledermatología
Por ese motivo, se han planteado ir de menos a más, “pero hay que hacerlo, eso sí modificando procesos. La interacción con los pacientes tiene que ser con precauciones tanto para ellos como para nosotros. Hemos contemplado citar a primera hora a los pacientes de riesgo y a los pacientes mayores, para que las instalaciones estén recién desinfectadas y no coincidan en salas con pacientes pediátricos”, explica el Dr. Vidal.
Además, el hospital ha facilitado tres smartphones de gran calidad para poder hacer teledermatología por videollamada. “Esperamos hoy viernes realizar una prueba con 20 pacientes. Con esta tecnología podremos quintuplicar el número de consultas diarias en una semana”, apunta.
Este dermatólogo señala que estos primeros pasos son una pincelada de optimismo. “Estamos construyendo cómo va a ser el día después, que no será como el que teníamos antes de la pandemia. Esta iniciativa que ha sido muy bien acogida entre el personal, la estamos poniendo en marcha trabajadores que ya hemos pasado por la infección y que, cuando nos dan el alta, como venimos de días de inactividad en casa, de no poder colaborar, venimos eufóricos por volver a ayudar”, resume el Dr. Santiago Vidal.
Construyendo la Dermatología durante la pandemia de COVID-19.