España participará en el ensayo en fase II de una vacuna anti COVID-19
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4 septiembre, 2020La infección por SARS-CoV-2 está generando sorpresas a medida que se va conociendo cómo el virus interfiere en el cuerpo humano y cuáles son las características del organismo que influyen en que el patógeno genere más o menos problemas. Si en un primer momento, se conoció con el virus generaba problemas dermatológicos en algunos afectados, ahora dos estudios liderados por dermatólogos españoles evalúan la relación entre el coronavirus y la alopecia.
Uno de estos trabajos es el coordinador el Dr. Sergio Vañó, responsable de la Unidad de Tricología del departamento de Dermatología en el Hospital Ramón y Cajal de Madrid, y que ha realizado junto con dermatólogos estadounidenses y cuyos resultados se han publicado en la JAAD. En él describe la posible implicación de los andrógenos en la gravedad de la infección COVID-19, cuya base vendría argumentada por el mecanismo molecular requerido por el SARS-CoV-2 para su infectividad.
Esto viene a ser corroborado a través de la valoración de pacientes en varios hospitales madrileños. “Hicimos un análisis de los pacientes ingresados en el Hospital Ramón y Cajal por COVID-19 y que estaban más graves. En ellos evaluamos la prevalencia de alopecia androgénica, y vimos que era mayor que en la población general. Esto también se observó en el Hospital Gómez Ulla y en el Hospital Príncipe de Asturias”, señala el Dr. Vañó.
La explicación que podría estar detrás de esta relación es que el virus SARS-CoV-2 para penetrar en las células pulmonares depende de su adherencia a la proteína TMPRSS2 (proteasa transmembrana de serina 2 asociada a la superficie del huésped). Y precisamente la expresión de esta proteína está relacionada con un incremento de la expresión del receptor androgénico.
Además, hay que tener presente que la enzima convertidora de angiotensina 2 (ACE), un receptor celular expresado en las células pulmonares, se une a la proteína viral (S), siendo otro receptor de entrada celular para el SARS-CoV-2 en el huésped humano. Y también se ha observado que la ACE tiene una actividad reducida cuando hay un descenso de las hormonas androgénicas.
“La hipótesis que planteamos es que aquellos sujetos con una actividad androgénica aumentada podrían estar predispuestos a infecciones COVID-19 más graves. Y de hecho, han sido varias las publicaciones que posteriormente se han realizado que vienen a apoyar esta teoría”, apunta el Dr. Vañó.
Tal y como explica el coordinador de Tricología de la AEDV, si se confirma esta teoría, podría tener sentido que los fármacos antiandrogénicos fueran útiles para mejorar la infección COVID-19, aunque para ello antes tendría que ratificarse estas conclusiones por una evidencia científica suficiente.
Caída de pelo masiva en pacientes COVID-19
Por otro lado, un segundo trabajo coordinado por el Dr. Óscar Muñoz, también dermatólogo del Grupo de Tricología del Hospital Ramón y Cajal, ha evaluado 200 casos en los que se ha producido un efluvio teléfono entre el tercer y cuarto mes después de haber sufrido la infección COVID-19. “Lo que hemos observado es que esta abundante caída de pelo se ha producido sobre todo en aquellas personas que han tenido fiebre a causa de la infección por SARS-CoV-2”.
Las conclusiones del trabajo, que está pendiente de publicar en la revista de la EADV donde se ofrecerán todos los datos de este estudio, sostienen que este problema se resuelve solo y que, en la mayoría de los casos, no hay que hacer nada, tan solo en unos pocos pacientes se plantea tratamiento para la caída de pelo.
Uno de los consejos que sí recomienda el Dr. Muñoz a las personas que les ocurra este problema es que se laven el pelo con normalidad. “No hay que retrasar su lavado, porque entonces la sensación de pérdida de pelo será mayor. Es mejor tener un lavado frecuente porque el impacto visual de caída será menor y se eliminará más rápidamente el pelo que se caerá tarde o temprano”.
Según avanza la pandemia, han sido muchos los estudios aportados por los dermatólogos de todos los países, incluido el nuestro, que mejoran el conocimiento de la infección y están contribuyendo a que cada vez se controle mejor.